Thomas Forsha de la gestora River Road es poco conocido en nuestro país, pero es uno de los grandes especialistas en invertir en compañías de alta rentabilidad por dividendo. Esta semana ha participado en nuestra Morningstar Investment Conference en Londres donde nos ha desvelado su estrategia para construir carteras centradas en compañías de alta rentabilidad por dividendo. Pero antes de ello ha insistido en que un dividendo atractivo no significa necesariamente una inversión atractiva y recomiendo mucha prudencia al elegir compañías que pagan elevados dividendos. Según él, los factores a tener en cuenta a la hora de elegir un valor de alta rentabilidad por dividendo son los siguientes:
¿Ha aumentado
la compañía su dividendo de forma regular?
¿Es el
payout ratio sostenible?
¿Es la
compañía financieramente solida?
¿Muestra la
dirección de la compañía importancia respecto al dividendo?
¿Cotiza el
valor a un precio razonable?
Dicho esto, a la hora de construir una cartera
centrada en dividendos, su estrategia es la siguiente. Para él la
diversificación es muy importante. Por ello recomienda una cartera compuesta
por un tercio de valores con un dividendo comprendido entre un 2 y un 4% (es lo
que llama la parte “core” de la cartera), un tercio en valores con una
rentabilidad por dividendo de entre el 3 y el 6% (es la parte “alpha”) y otro
tercio (la parte “high yield”) en compañías de elevado dividendo (más del 5%),
aunque en la práctica el gestor suele variar esos porcentajes en función de la
situación de los mercados (en la actualidad tiene un 60% en core, un 35% en
alpha y apenas un 5% en high yield).
La siguiente cuestión es dónde encontrar
compañías que responden a estos criterios. La respuesta de Forsha, en cierta
medida sorprendente ya que va en contra del pensamiento general, es que el
segmento de pequeñas compañías americanas es el más interesante, en particular
porque en esas compañías el dividendo es la forma en la que los directores se
ven remunerados.