Efectivamente, las valoraciones se han recuperado después de haber sufrido mucho tras alcanzar los niveles de finales de los años noventa. La gente se ha percatado de que el sector es rentable y que ofrece perspectivas interesantes.
Este regreso ha venido apoyado por operaciones de reestructuración o de acercamiento que han confirmado que muchas de estas empresas pueden ser un objetivo muy atractivo. Por otra parte, los balances de las compañías han sido saneados y operadores que h
ace algunos años soportaban unas deudas muy importantes pueden, hoy en día, presumir de tener unas estructuras financieras bajo control.
¿Cuáles son las grandes tendencias dentro del sector?
Desde principio de año, el sector se ha comportado globalmente bien. Las maniobras en este mercado dejan presagiar un movimiento de consolidación a nivel mundial.
Respecto a la evoluciones futuras, hay que distinguir lo que ocurre el mercado de los móviles y en el de la telefonía fija. La cuestión para los operadores de móviles es su capacidad para mantener un ritmo sostenido de innovación a nivel de productos con el fin de preservar los márgenes. Con la telefonía de tercera generación, los operadores de móviles disponen a priori de una buena fuente de rentabilidad. Queda por ver a qué velocidad se efectuará la migración hacia la tercera generación. Si el paso se realiza lentamente, algunos operadores pueden sufrir problemas a corto plazo. Vamos a tener que estar muy atentos el año que viene a la forma en la que los operadores de móviles dan este giro.
En el mundo de la telefonía fija, el gran tema es la banda ancha que permite ofrecer nuevos servicios a los abonados. En los diferentes mercados nacionales, los reguladores locales son los que sufren la apertura. Aquí también se plantea la cuestión de la velocidad a la que los clientes van a adoptar estos nuevos servicios, pero sobre todo se plantea el problema de los nuevos entrantes en el mercado.
Aunque no creo que veamos aparecer nuevos jugadores en el mercado de la tercera generación de móviles, sí que pienso que la banda ancha y la desregulación van a propiciar la instalación de nuevos operadores virtuales que no tienen capacidad propia, pero que se aprovisionarán de los que detienen las infraestructuras.
Parece más pesimista respecto a la telefonía fija….
No pesimista, expectante. Además del riesgo ligado a la aparición de nuevos competidores y una tendencia a la rebaja de las tarifas, no veo grandes aplicaciones con la banda ancha que permitan aumentar la factura de los clientes.
En el caso, por ejemplo, de la televisión por internet, una gran parte de los derechos van a las cadenas; en los intercambios de datos ya se aprecia una fuerte lucha. En el pasado, los operadores fijos han conseguido amortiguar las bajadas de tarifas con ganancias de productividad, pero no creo que estas ganancias puedan mantenerse indefinidamente.
Además, hay factores regionales que no conviene menospreciar. En Estados Unidos, por ejemplo, los beneficios de los operadores regionales corren el riesgo de sufrir por culpa de la competencia, pero también por culpa del déficit de los fondos de pensiones.
¿Cómo gestiona el fondo ? ¿Basándose en la selección de valores o a partir de una distribución geográfica ?
Somos tres gestores los que intervenimos sobre el fondo: un gestor en Estados Unidos para Norteamérica, otro en Singapur para Asia y yo mismo para Europa. No tenemos límites a priori en cuanto a la distribución geográfica. No partimos del principio que tenemos que tener tal o tal exposición al mercado norteamericano u europeo.
Nuestro enfoque es totalmente “bottom-up”, es decir construimos la cartera a partir de nuestra selección de valores. Hacemos un balance cada semana para ver si tenemos que dar entrada o salida a determinados valores de nuestra cartera.
Me imagino que un fondo especializado en telecomunicaciones tiene una orientación hacia el crecimiento...
Nuestro enfoque no es más de crecimiento que de valor. En la selección de títulos, nos interesamos a su entorno competitivo y, teniendo en cuenta el análisis de su mercado, intentamos comprender de qué forma puede progresar.
Un fondo dedicado al sector de las telecomunicaciones, ¿no es un poco exclusivo y peligroso?
No porque, en realidad, el universo de las telecomunicaciones es extremadamente rico y complejo en el que podemos encontrar tanto empresas de crecimiento como empresas de tipo valor. Además, el fondo invierte en el sector a nivel mundial, lo que nos permite beneficiarnos de las oportunidades allí donde se encuentran.
Luego, tampoco dudamos, cuando la ocasión se presenta, en invertir en valores tecnológicos como Dell, Hewlett-Packard o Samsung…