La inflación en la eurozona cayó al 2,6% interanual en febrero, por debajo del 2,8% de enero, según la estimación preliminar de Eurostat, pero por encima de las expectativas de los economistas. Se espera que el Banco Central Europeo revise a la baja las expectativas de inflación en su reunión del 7 de marzo, pero que mantenga sin cambios los tipos de interés.
"La inflación en la eurozona continuó su tendencia a la baja en febrero, con un aumento de los precios de sólo el 2,6%, frente al 2,8% de enero y el 2,9% de diciembre. Esta cifra fue ligeramente superior a las expectativas de una subida del 2,5%, pero al menos las cosas se mueven en la dirección correcta", declaró Michael Field, estratega de mercados europeos de Morningstar.
La inflación subyacente, que muestra los precios sin los costes de la energía y los alimentos, también cayó al 3,1% interanual. En enero se situó en el 3,3%.
En febrero, los mayores contribuyentes a la inflación de la eurozona fueron los alimentos, el alcohol y el tabaco (+4% interanual), seguidos de los servicios (+3,9%), los bienes industriales no energéticos (+1,6%) y la energía (-3,7%), según las estimaciones de Eurostat.
"La inflación subyacente se situó en el 3,1%, con un descenso intermensual desde julio de 2023, lo que confirma que los elevados tipos de interés están teniendo un impacto perceptible", añadió Field. "En conjunto, estas cifras sirven para reforzar los llamamientos para que el BCE recorte los tipos, posiblemente más pronto que tarde".
¿Bajará los tipos el ECB el 7 de marzo?
La ralentización de la subida de precios refuerza las especulaciones de que el Banco Central Europeo (BCE) revisará a la baja las estimaciones de inflación en su reunión de política monetaria del 7 de marzo.
Las bolsas europeas subieron tras la publicación de los datos.
"A pesar de estar cerca de sus respectivos objetivos de inflación, los banqueros centrales de Estados Unidos y Europa parecen indecisos a la hora de recortar los tipos", dijo Jonathan Gregory, responsable de renta fija británica de UBS Asset Management en una nota reciente.
"En enero dijimos que los precios de mercado se estaban adelantando a la magnitud del recorte de tipos ya descontado para Estados Unidos y la eurozona para el verano de 2024".
"Mientras escribimos, las expectativas del mercado implican que la Reserva Federal y el Banco Central Europeo recortarán los tipos dos veces cada uno para finales de julio (suponiendo un 0,25% en cada movimiento), frente a los casi cuatro recortes descontados para el mismo periodo hace unas semanas. El precio actual nos parece mucho más razonable".
El BCE seguirá vigilando los datos salariales. "Tras el punto álgido de la pandemia, no hubo movimientos significativos en el mercado laboral, lo que alimentó la inflación salarial", señala Emile Gagna, economista de Candriam, que opina que "el Banco Central Europeo permanecerá vigilante para que esta dinámica salarial no contribuya a desestabilizar las expectativas de inflación y a alimentar la subida de precios." Sin embargo, el riesgo parece limitado, según las previsiones de Gagna.