Repunte en 2021
La industria del lujo se está beneficiando de un fuerte repunte de las ventas, gracias a la resistencia de los ingresos de los consumidores, a la estabilidad del mercado inmobiliario y a la subida de las bolsas, al ahorro acumulado durante los periodos de reclusión y a la necesidad psicológica de la gente de recompensarse tras un periodo estresante.
Los precios de las acciones de los principales grupos de lujo se han comportado bien, dejando a muchos actores del sector cotizando a valoraciones récord. Sin embargo, desde una perspectiva fundamental, no hemos sido capaces de identificar ningún cambio estructural en el sector después de la COVID-19 que justifique un crecimiento y una rentabilidad sostenibles, y por tanto unas valoraciones más altas.
Creemos que la recuperación del producto interior bruto, o PIB, y del consumo de lujo en Estados Unidos es temporal.
Aunque esperamos que los consumidores chinos sigan impulsando el crecimiento de la industria, no prevemos una aceleración después de la crisis del COVID-19, mientras que el "bienestar común" del gobierno chino puede perjudicar temporalmente a la industria debido al aumento de los impuestos y al sentimiento desfavorable hacia el consumo ostentoso.
Por último, aunque esperamos que las ventas online alcancen más del 30% de las ventas del sector durante la próxima década, frente a una tasa de crecimiento de un solo dígito en 2019, no esperamos que este cambio altere de forma significativa la economía del sector.
Aunque esperamos que los consumidores chinos sigan impulsando el crecimiento de la industria, no prevemos una aceleración después de la crisis del 19, mientras que el "bienestar común" del gobierno chino puede perjudicar temporalmente a la industria debido al aumento de los impuestos y al sentimiento desfavorable hacia el consumo conspicuo.
Por último, aunque esperamos que las ventas online alcancen más del 30% de las ventas del sector durante la próxima década, frente a una tasa de crecimiento de un solo dígito en 2019, no esperamos que este cambio altere de forma significativa la economía del sector.
Pricing Power
Se espera que las empresas de lujo mantengan sus precios en este ámbito, gracias al creciente control de la distribución y al poder de fijación de precios inherente al sector.
Aunque el canal de venta online del sector del lujo parece ser más rentable que el de prêt-à-porter, gracias a una media de pedidos más alta y a un menor índice de devoluciones, es poco probable que este cambio se traduzca en un aumento significativo de los beneficios para las empresas que ya tienen una alta densidad de ventas en tienda, como Louis Vuitton en LVMH ("Wide Moat").
Las empresas con menor densidad de ventas, como Hugo Boss ("Narrow Moat"), podrían beneficiarse del cambio siempre que gestionen proactivamente su cartera de tiendas.
Valoraciones difíciles de justificar
LVMH es el líder mundial del lujo, con un grupo diversificado que controla una cartera de marcas emblemáticas como Louis Vuitton (moda), Tiffany, Bulgari (joyería) y Hennessy (coñac), que debería permitirle generar un alto nivel de rentabilidad del capital a largo plazo.
A pesar de la calidad de su modelo de negocio y de su gestión, consideramos que la valoración actual de la acción es exagerada. LVMH cotiza con una prima significativa respecto a su historia.
Para justificar el nivel de valoración actual, el mercado asume implícitamente que el flujo de caja libre de la empresa crecerá un 5% a perpetuidad, con un aumento del 30% anual en los próximos tres años, según los datos del consenso.
En particular, el mercado incluye un rendimiento continuado de Louis Vuitton, con un crecimiento de dos dígitos y márgenes superiores al 40%, en línea o por encima de lo que la marca ha registrado en los últimos tres años y muy por encima de lo que el negocio ha registrado en crecimiento orgánico en los últimos diez años (9% anual).
El mercado también incluye un rendimiento superior por parte de Dior, que se espera que crezca un 20% al año y registre un margen operativo del 30% (frente a una media del 19,6% en los últimos 10 años).
Nuestras estimaciones son más modestas y nos llevan a una estimación del valor razonable de 394 euros por acción.