Hemos analizado el número de fondos dirigidos por mujeres en el Reino Unido, Italia, España y Francia para descubrir que las mujeres son minoría en todos los mercados.
En el Reino Unido, todavía hay más fondos dirigidos por hombres llamados “Dave” que gestores femeninos en total. Unos 68 fondos están dirigidos por hombres llamados Dave o David, pero sólo hay un total de 45 gestoras mujeres en el Reino Unido.
Ruli Viljoen, responsable de selección de fondos en Morningstar, afirma: "Si 2020 se recuerda como el año de una pandemia mundial, también podría recordarse como el año en el que los derechos de los grupos minoritarios pasaron a primer plano. La igualdad de género no es en absoluto un tema nuevo y a lo largo de los años hemos visto muchas iniciativas para igualar las condiciones. Pero, como grupo, las mujeres siguen estando lamentablemente infrarrepresentadas en el ámbito de la gestión de fondos".
Las 45 mujeres gestoras de fondos de nuestro análisis en el Reino Unido gestionan un total de 95 fondos entre todas ellas, lo que equivale a sólo el 7,7% de los fondos domiciliados en el Reino Unido de nuestra muestra, mientras que los gestores llamados “Dave” gestionan el 5,5% de los fondos del Reino Unido. El total de activos de los fondos británicos que analizamos fue de 550.00 millones de euros, de los que las mujeres sólo gestionan 51.000 millones, alrededor del 9,3% del total. En comparación, los hombres llamados Dave gestionan 32.000 millones de los fondos en el Reino Unido.
Nuestro análisis de hace un año reveló que sólo el 7,2% de los fondos domiciliados en el Reino Unido tenían una gestora al frente, por lo que, si bien se ha producido una cierta mejora en los últimos 12 meses, las mujeres siguen siendo firmemente minoritarias en la gestión de fondos.
Hemos analizado únicamente la clase de acciones más antigua y las clases de acumulación de los fondos domiciliados en el Reino Unido, excluyendo los fondos indexados. Descontando los fondos en los que el nombre del gestor no figuraba en Morningstar Direct, la muestra incluía 1.226 fondos.
Hemos repetido el ejercicio en Italia, España y Francia para ver en qué mercado había más mujeres gestionando el dinero de los inversores. En estos mercados, analizamos los fondos disponibles domiciliados en Europa, seleccionando los que estaban a la venta en cada país. Y aunque “David” no es un nombre tan común en el continente, persiste el mismo patrón.
En Italia, había 646 fondos en nuestra muestra, con un patrimonio total de 140.000 millones de libras. Y mientras hay 39 fondos dirigidos por hombres llamados Andrea, sólo hay 23 gestoras mujeres en total. Estas mujeres gestionan 81 fondos entre ellas, lo que equivale al 12,8% de los fondos de nuestra muestra, con un patrimonio que asciende a algo menos de 15.000 millones de libras, aproximadamente el 10,7% del total de activos.
En España, el número de mujeres gestoras de fondos es significativamente mayor. Unos 248 de los 1.187 fondos de nuestra muestra tenían una mujer al frente, lo que equivale al 20,9%. Entre ellos había 72 gestoras individuales, que dirigían 68.000 millones de libras de un total de 258.000 millones de libras de activos gestionados. Estas cifras convierten a España en el país más propicio para las gestoras de fondos de nuestro universo. Los nombres más comunes entre los gestores masculinos son José y Antonio, con 46 mandatos gestionados por cada grupo. Sin embargo, hay 72 fondos gestionados por mujeres que se llaman María, el nombre más frecuente en nuestra muestra española. Aun así, las Marías sólo gestionan 11.900 millones de libras de activos entre todas ellas, frente a los 18.900 millones de libras de los Josés.
Por último, examinamos Francia, que cuenta con la muestra más amplia, con 1.942 fondos. De ellos, unos 352 tenían una gestora, lo que equivale al 18,1% de los fondos del grupo. En este grupo había 150 gestoras mujeres individuales, que gestionan un total de 22.000 millones de libras esterlinas entre todas ellas. Las mujeres gestionan el 18,1% de los fondos de nuestra muestra francesa y el 17,7% de los activos gestionados.
La pregunta es: ¿están las mujeres infrarrepresentadas en el sector por falta de demanda o por falta de oferta? En cuanto a la demanda, vemos definitivamente pruebas de cambio, ya que muchas empresas destacan ahora la necesidad de aumentar la diversidad de género en sus empresas y, en algunos casos, establecen objetivos e hitos específicos para que esto se logre en un plazo determinado.
Desde el punto de vista de la oferta, las empresas deben considerar si las descripciones de los puestos de trabajo se redactan de forma que atraigan al mayor número posible de personas. Se ha dicho a menudo que, si una mujer lee la descripción de un puesto, a menos que piense que puede hacer todo lo que se le pide, puede desistir de solicitarlo. En cambio, los hombres se presentan si pueden cumplir el 50% de los requisitos.
Aunque el análisis de este año muestra cierta mejora, es evidente que queda camino por recorrer. Algunos expertos predicen que el cambio de hábitos laborales y la aceptación cada vez mayor del trabajo desde casa podrían contribuir a igualar aún más las condiciones de trabajo entre hombres y mujeres. Si hay un cambio que puede surgir de esta pandemia es la posibilidad de que la sociedad adopte prácticas laborales más flexibles, lo que puede ayudar a mejorar la diversidad en el lugar de trabajo y, potencialmente, todos saldremos ganando como resultado.