Tras una década de escasas rentabilidades, las acciones de los mercados emergentes están empezando a recuperarse. A pesar de una serie de vientos en contra en los últimos tres años, el Índice MSCI Emerging Markets ha proporcionado rentabilidades casi idénticas al Índice MSCI World. Mientras tanto, desde su creación en enero de 2001, el MSCI Emerging Markets ha superado al MSCI World en casi un 3,5% anual en términos anualizados. Esto subraya la importancia de considerar los fondos de acciones de mercados emergentes dentro de la parte principal de una cartera.
Los mercados emergentes pueden ser particularmente interesantes para aquellos inversores que buscan ingresos por dividendos. Si observamos los índices de alta rentabilidad por dividendo del MSCI - barómetros ampliamente aceptados para las acciones de dividendos - los mercados emergentes ofrecen actualmente un rendimiento del 5,3%, alrededor de 1,5 puntos porcentuales por encima de los países desarrollados.
Por lo general, las estrategias de dividendos implican equilibrar la rentabilidad por dividendo actual con la capacidad de la cartera de ofrecer un crecimiento a largo plazo. Sin embargo, esas estrategias pueden variar de un fondo a otro: algunas buscan maximizar el rendimiento, mientras que otras favorecen unos ingresos más bajos, pero más estables a largo plazo.
Esto significa que los inversores deben llevar a cabo el debido análisis para determinar qué estrategia les conviene más. Para ayudarles, hemos analizado cuatro ETF de dividendos domiciliados en Europa dentro de la categoría Morningstar de Renta Variable Emergente Global.
Fidelity Emerging Markets Quality Income ETF
En lugar de centrarse en el rendimiento de los dividendos, este ETF recorre el universo bursátil en busca de compañías altamente rentables. Los candidatos son juzgados por una serie de factores, incluyendo la eficiencia con la que convierten los ingresos en dinero en efectivo y lo bien y durante cuánto tiempo pueden cumplir con las obligaciones de la deuda.
Este enfoque disminuye considerablemente la probabilidad de invertir en empresas con beneficios inestables o con una deuda creciente que puede llevar a recortes de dividendos.
La advertencia para los inversores que buscan ingresos es su rentabilidad por dividendos; con un 3,7%, es el más bajo del grupo de ETFs que hemos analizado. Sin embargo, debido a su enfoque en empresas de calidad, este ETF tiene un gran potencial para ofrecer una sólida rentabilidad total a largo plazo, es decir, teniendo en cuenta los dividendos reinvertidos más la apreciación del capital.
Con cerca de 180 acciones, el fondo está bien diversificado y las ponderaciones por países y sectores están limitadas para igualar las del amplio índice de mercados emergentes.
WisdomTree Emerging Markets Equity Income ETF
Este ETF de WisdomTree tiene una cartera muy amplia y diversificado que busca compañías que pagan la mayor cantidad de dividendos. Si bien esto puede parecer un poco confuso, en realidad es muy simple: en el punto de partida de la construcción de la cartera, se asigna a las empresas el peso estándar que tienen en un fondo de seguimiento del índice de acciones principal. Las ponderaciones se incrementan o disminuyen en función de la rentabilidad por dividendo que ofrecen.
Este enfoque suele favorecer a las empresas de los sectores de servicios públicos, materiales y energía, ya que éstos suelen ofrecer rendimientos superiores a la media del mercado. Actualmente, la ponderación combinada de estos sectores en el ETF se sitúa en torno al 45%, frente a una media del 13% en los fondos de la misma categoría Morningstar.
En el proceso de calificación de los analistas de Morningstar, solemos favorecer la selección de calidad de las empresas en lugar de la simple búsqueda de rendimientos. Sin embargo, somos un poco menos exigentes con las estrategias que están altamente diversificadas. Es el caso de este ETF, que tiene casi 600 acciones.
Esto ayuda a distribuir el riesgo de cualquier recorte de dividendos en el futuro. En comparación con los otros tres fondos, el ETF del Wisdom Tree destaca por su baja comisión del 0,46%.
SPDR S&P Emerging Markets Dividend Aristocrats ETF
Este ETF de SPDR ofrece una alta rentabilidad por dividendo al ponderar sus acciones según el dividendo que pagan. Sin embargo, a diferencia del ETF de WisdomTree, no se tiene en cuenta el tamaño de la empresa, lo que suele significar que hay más empresas pequeñas en la cartera.
Este enfoque maximiza el rendimiento actúa, pero puede limitar el potencial de rendimientos futuros. Esto se debe a que cuando las empresas distribuyen la mayor parte de sus ganancias, tienen menos para invertir en nuevos proyectos.
Para evitar las trampas de dividendos, SPDR requiere al menos tres años ininterrumpidos de beneficios estables y pagos de dividendos. Aunque esto no es infalible, ayuda a mejorar la calidad general de la cartera y reduce la posibilidad de invertir en potenciales compañías que recorten sus dividendos.
Al tener sólo 100 acciones, el rendimiento podría estar en cierto riesgo por las fuertes pérdidas de empresas individuales. Para hacer frente a esto, SPDR limita la ponderación en valores, sectores y países individuales al 3%, 25% y 25% respectivamente.
iShares EM Dividend ETF
El ETF de iShares tiene una cartera relativamente concentrada de 100 acciones de alto rendimiento. Se han establecido algunos criterios de capacidad de pago mínimos, como un payout máximo, pero el objetivo principal de la estrategia es obtener el máximo rendimiento con las acciones seleccionadas, independientemente de las características de calidad y de tamaño.
Esto hace que la estrategia sea particularmente vulnerable a las trampas de dividendos; una situación en que las acciones muestran una alta rentabilidad por dividendo prevista que es demasiado buena para ser verdad. En muchos casos, la razón del alto rendimiento se explica por una caída del precio de la acción, ya que el mercado prevé problemas con el negocio.
Como el fondo no pondera a las empresas por su capitalización de mercado, tiene una inclinación hacia las empresas de pequeña y mediana capitalización, lo que puede dar lugar a una mayor volatilidad. Sin embargo, para limitar el riesgo de concentración, la exposición a países se limita al 25%.
¿Cómo lo han hecho los fondos?
En los últimos cinco años, dos tercios de la rentabilidad del índice MSCI Emerging Markets han sido proporcionados por tres sectores: el financiero, el tecnológico y el de servicios de comunicación. Sin embargo, aunque todos los índices centrados en los dividendos han tenido una exposición similar a estos sectores, sus rentabilidades han variado. El fondo de Fidelity, por ejemplo, ha superado al índice S&P en aproximadamente un 2,2% anual en el último decenio.
Centrarse en la calidad a la hora de elegir las acciones de dividendos ha sido una estrategia superior a largo plazo, pero puede tener una rentabilidad inferior en períodos cortos en relación con las estrategias que se centran en la maximización de la rentabilidad por dividendo. Por ello, los inversores necesitan tener una visión clara de su objetivo y horizonte de inversión para seleccionar el producto adecuado.
El Fidelity Emerging Markets Quality Income ETF es una opción interesante para los inversores que buscan un flujo constante de ingresos por dividendos a largo plazo, mientras que los ETF de WisdomTree e iShares serían más adecuados para los inversores que desean maximizar los ingresos por dividendos en períodos cortos.