El debate es intenso en la élite tecnológica sobre la inteligencia artificial y su influencia destructiva o enriquecedora en la vida humana. El fundador de Tesla, Elon Musk, ha estado sonando la campana de alarma durante meses diciendo, por ejemplo, que la inteligencia articficial sería la causa de la tercera Guerra Mundial. El fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, por su parte, sostiene que la inteligencia artificial será un beneficio para el planeta.
Pueden pasar décadas antes de averiguar quién tiene razón, pero el hecho de que dos gigantes de la tecnología se muestren tan apasionados por la inteligencia artificial significa una cosa para los inversores: este mercado va a ser enorme. Según un estudio publicado por Statistics, se espera que los ingresos globales de la inteligencia artificial aumenten de 2.400 millones de dólares en 2017 a casi 60.000 millones de dólares en 2025.
¿Qué caracteriza una acción de inteligencia artificial? Actualmente, la inteligencia artificial es un término general para hablar de automatización, robótica, big data y otras innovaciones tecnológicas. De alguna manera, la inteligenica artificial es todo esto, pero donde el mercado está creciendo es en el área más avanzada de la inteligencia artificial, gran parte de la cual aún no ha emergido. Esta categoría incluye, entre otros, los vehículos sin conductor, el análisis predictivo, la robotización de trabajos de oficina, etc.
Muchas de estas cosas aún están lejos de ser una realidad, dice Abhinav Davuluri, analista de acciones de Morningstar. Pero estos inventos están llegando, y muchas empresas ya están utilizando la inteligencia artificial, la mayoría de ellas en productos que afectan a los consumidores. La tecnología de voz controlada, como el Alexa de Amazon o el Google Home de Alphabet son buenos ejemplos de apuestas por la inteligencia artificial. Facebook, Alphabet y Amazon, que recogen una gran cantidad de datos sobre sus usuarios, están utilizando la inteligenica artificial para mejorar su investigación e interacción con los clientes.
Pocas apuestas puras
Aunque invertir en empresas de inteligencia artificial es una apuesta evidente (es difícil encontrar a alguien que no piense que la inteligencia artificial es el futuro), en la práctica es mucho más complicado de lo que parece. No hay muchas empresas que sean puras apuestas hacia la inteligencia artificial ya que la mayoría de las pequeñas empresas centradas en IA terminan siendo compradas por otras, o están satisfechas con el capital de riesgo que recaudan y prefieren permanecer en el segmento privado.
En la mayoría de los casos, invertir en inteligencia artificial significa ser invertir en Amazon, Google, Facebook, IBM o Intel: empresas que también operan en muchos sectores fuera de la inteligencia artificial. Para la mayoría de ellas, la inteligencia artificial es sólo una pequeña parte de su negocio. Aunque Intel no desglosa sus cifras, Davuluri estima que la inteligencia artificial representa menos del 5% de los ingresos de la empresa. Esta cifra aumentará en los próximos años para Intel y para los demás.
En comparación, la compañía de semiconductores NVIDIA, considerada una de las más puras del sector, ha explotado en los últimos años. Los precios de las acciones han subido bruscamente desde 2012 (1.500% frente al 78% del índice S&P 500). Los ingresos también aumentaron casi un 125%, alcanzando los 10.000 millones de dólares en el mismo período del ejercicio fiscal 2017, mientras que los beneficios diluidos por acción aumentaron un 270%.
A alto crecimiento, altas valoraciones
Otro problema que uno encuentra en las apuestas sobre inteligencia artificial es el de las valoraciones. Actualmente NVIDIA cotiza con un PER de 56, mientras que Amazon tiene un ratio de 249. Sin embargo, como ocurre con muchas empresas de tecnología, es difícil valorarlas sólo a partir de los beneficios actuales. Tienen valoraciones astronómicas debido a la promesa de sus retornos futuros. Si la inteligencia artificial acaba cambiando la vida de muchas personas, pagar un PER de 56 euros por NVIDIA no sería demasiado.
Para los inversores, la cuestión no es tanto si hay que apostar por la inteligencia artificial sino cuándo. Todas las revoluciones tecnológicas pasan por el mismo ciclo: locura, depresión y adopción. Scott Burns, director de soluciones de gestión de activos de Morningstar, dice que probablemente estamos en un momento de locura. En algún momento u otro, las empresas empezarán a no cumplir sus objetivos y el sentimiento de los inversores cambiará.
“Seamos pacientes, y cuando hay una liquidación o un mal trimestre o una pequeña corrección, ahí es donde hay oportunidades atractivas", dice.
Hagan sus apuestas
Aunque el mercado puede tardar algún tiempo en recortar, los inversores interesados en la inteligencia artificial deberían empezar a decidir qué sectores elegir. La inteligencia artificial está presente en dos subsectores principales: los semiconductores y todo lo demás. Las empresas de semiconductores, como Intel y NVIDIA, son las que están creando los chips utilizados para poner en marcha esta tecnología.
Los otros actores, como Google, Amazon, IBM y Facebook, están involucrados en varias iniciativas de inteligencia artificial, pero como hemos visto, hay muchas otras cosas que los ocupan. La clave es saber cuáles serán los que más se beneficiarán de la inteligencia artificial, ya sea para avanzar en sus propias operaciones o para desarrollar productos que puedan vender a otros.
"Tanto Alphabet como Amazon son interesantes", agrega Daviluri. Alphabet parece ser la más enchufada de las dos, con varios productos relacionados con la inteligencia artificial en estudio. Amazon podría beneficiarse de la inteligencia artificial de otras maneras. Por ejemplo, su nueva división de Amazon Web Services, que es la única parte rentable de la compañía, es la ubicación preferida de almacenamiento en la nube para muchas empresas. Cuantos más datos tenga almacenados en sus servidores (y la inteligencia artificial necesita muchos datos para funcionar), más crecerá este segmento de negocio de Amazon.
"En el lado de los chips, Intel será una oportunidad tan pronto como bajen un poco las acciones", dice Davuluri. Le gustan algunas de las adquisiciones de la compañía relacionadas con la inteligencia artificial: Intel compró la empresa de aprendizaje profundo Nervana en agosto de 2016 por cerca de 400 millones de dólares, por ejemplo, y cree que la compañía habrá cambiado bastante en cinco o diez años a medida que la inteligencia artificial se convierta en una parte más importante de su negocio.
Qualcomm también tiene un futuro interesante, afirma Davuluri. Etá muy involucrada en el smartphone, y si ha tenido un mal resultado, es debido a su batalla legal con Apple, pero probablemente va a empezar a desarrollar más chips compatibles con la inteligencia artificial.
«No es una apuesta pura, pero es una compañía a tener en cuenta", dice. Actualmente cotiza con cuatro estrellas, lo que sugiere que sus acciones están infravaloradas.»
Los inversores que buscan tener una cesta de valores relacionados con la inteligencia artificial pueden recurrir al ETF Global X Robotics & Artificial Intelligence (BOTZ), que ha subido más de un 50% (en dólares) desde principios de año. La cartera incluye NVIDIA, la empresa japonesa de sensores Keyence, e Intuitive Surgical (ISRG), una empresa de robótica del sector sanitario.
En cualquier caso, el mensaje para los inversores es el siguiente: apuesten, esperen a que se produzca una recesión bursátil y observen cómo se acumulan las ganancias.
Si quiere conocer la cartera completa del ETF Global X Robotics & Artificial Intelligence, la hemos publicado en nuestra cuenta de Twitter @MorningstarES. Puede verla pinchando aquí.