En marzo del 2016 Morningstar puso en marcha en colaboración con Sustainalytics un sistema de clasificación que compara el perfil ESG (factores de medioambiente, responsabilidad social y gobierno corporativo) de los fondos con sus competidores dentro de la misma categoría. El Rating de Sostenibilidad Morningstar tiene como objetivo ayudar a los inversores a separar rápidamente los fondos que son fieles a su etiqueta de "socialmente responsables" de los que no lo son.
Es importante, sin embargo, seleccionar estos productos después de haberlos examinado en detalle, y no sólo en base a esta calificación.
Por ejemplo, de acuerdo con el último Morningstar Asset-Class Spotlight, dedicado a la renta variable internacional, en la actualidad hay 26 fondos pasivos de renta variable global disponibles en Europa elegibles para esta nota. En términos medios consiguen al menos 3 globos, lo que indica un perfil de sostenibilidad medio. Entre ellos encontramos a 13 productos que tienen un rating por encima de la media, con 4 o 5 globos.
El análisis muestra que los fondos con las puntuaciones más altas de sostenibilidad tienden a estar más concentrados en términos de número de valores dentro de la cartera, mientras que aquellos con una puntuación inferior a nivel de sostenibilidad tienden a ser más diversificados. Este informe es bastante intuitivo: al aumentar el número de valores de la cartera, la exposición ESG pierde en pureza, porque los títulos agregados son menos consistentes con criterios de sostenibilidad. Esto explica por qué la mitad de la muestra recibió una calificación "media" de 3 globos.
Relación entre el número de títulos en cartera y percentil ESG en la categoría
Otra característica de los fondos pasivos "responsables" es tener un error de seguimiento (o "tracking error", es decir, la volatilidad de la diferencia en la rentabilidad de un fondo y la de su índice de referencia) por encima del de sus competidores tradicionales, como se muestra en la siguiente ilustración. Una vez más, esto no es sorprendente: al tener un menor número de valores que el índice de referencia, la exposición a la "beta" del mercado es menor.
Relación entre el número de títulos en cartera y el «tracking error»
Por eso es muy importante que los inversores sean conscientes de este "compromiso" necesario entre una fuerte exposición ESG por un lado y una amplia diversificación y bajo error de seguimiento por otra.
Por ejemplo, los inversores que tienen convicciones muy pronunciadas pueden favorecer una exposición más pura a los factores ESG, pero a costa de una cartera más concentrada y una diferencia potencial más importante con respecto al índice. Los inversores que buscan un producto pasivo por su exposición "core" pueden, por el contrario, estar más dispuestos a comprometer la pureza ESG (aceptando compañías menos virtuosas), pero a cambio de mantener los beneficios de la diversificación y un error de seguimiento más bajo.
Nota: La información utilizada en este artículo ha sido extraída de nuestra plataforma para inversores profesionales Morningstar Direct. Si es inversor profesional y quiere saber más sobre Morningstar Direct haga clic aquí