El PowerShares S&P SmallCap Low Volatility invierte de forma agresiva en acciones de pequeña capitalización con baja volatilidad. Debería ofrecer un mejor perfil de rentabilidad/riesgo que el S&P SmallCap 600 y que la mayoría de sus competidores. Pero puede hacer apuestas concentradas en determinadas industrias a veces y puede tener una alta rotación de cartera. Además, tiene poco historial. Estas consideraciones limitan su Morningstar Analyst Rating a Bronze.
Cada trimestre, el fondo elije las 120 acciones menos volátiles del índice SmallCap 600 de S&P durante los últimos 12 meses y los pondera por la inversa de sus volatilidades, de modo que lo valores menos volátiles tendrán un mayor peso dentro de la cartera. Esta estrategia asume implícitamente que la volatilidad relativa reciente persistirá a corto plazo. No considera cómo interactúan las acciones de la cartera entre sí.
Las acciones que pasan el corte tienden a disfrutar de flujos de efectivo más estables que la media de valores de pequeña capitalización. Esto debería permitir que el fondo afronte mejor las crisis del mercado que la mayoría de sus competidores, pero puede hacer que se quede atrás en entornos de mercado más alcistas. Debido a que no hay límites en las ponderaciones por sector, el fondo puede terminar con grandes apuestas sectoriales. Pero estas inclinaciones pueden cambiar con el tiempo. Por ejemplo, a finales de enero de 2017, las acciones inmobiliarias representaban el 16% de la cartera, frente al 26% del año anterior.
Mientras que las acciones de pequeña capitalización tienden a ser más volátiles que las acciones de gran capitalización, la ventaja de rentabilidad de las acciones de baja volatilidad ha sido históricamente mayor entre las acciones más pequeñas. Una gran parte de esta ventaja proviene de evitar las pequeñas acciones más arriesgadas, las cuales tienden a negociarse con valoraciones altas y con pobre rentabilidad.