Bank Degroof Petercam prevé que en 2016 la economía global seguirá su recuperación de forma moderada, en un contexto de política monetaria con condiciones favorables y una reducción de los precios de la energía y las materias primas. Como de costumbre, subsisten varios riesgos, como el endurecimiento de la política monetaria en Estados Unidos y una contracción económica más pronunciada en China.
Recuperación global
La recuperación global proseguirá de forma moderada en un contexto de políticas presupuestarias y monetarias poco estrictas y un descenso de los precios de la energía. La economía china empieza a mostrar los primeros signos de mejora tras la adopción de medidas de reactivación. Además, los principales indicadores muestran que la actividad económica sigue resistiendo en la mayor parte de los países desarrollados.
No obstante, es probable que al mismo tiempo el crecimiento global permanezca bastante moderado. La divergencia entre mercados desarrollados con buen rendimiento y mercados emergentes en dificultades debería persistir el próximo año, si bien estos últimos probablemente vuelvan a recuperar una cierta estabilidad.
Política monetaria
A pesar del repunte de los tipos de interés en Estados Unidos, el primero desde 2006, las condiciones monetarias mundiales deberían permanecer muy flexibles. Mientras la Fed y el Banco de Inglaterra comienzan a endurecer la política monetaria, el BCE, el Banco de Japón y el Banco Popular de China intensifican las medidas de reactivación monetaria. Además, los bancos centrales de Estados Unidos y Gran Bretaña parecen dispuestos a adoptar una actitud de extrema prudencia. En cuanto a la moneda, existen motivos para pensar que la revalorización del dólar no está asegurada.
Riesgos
Los dos riesgos más importantes siguen siendo una restricción monetaria más rápida de lo previsto en Estados Unidos, y un aterrizaje forzoso en China. Estos riesgos afectan sobre todo a los países emergentes, como los exportadores de materias primas (Colombia, Rusia, Chile o Malasia) o los países que registran importantes déficits por cuenta corriente (Turquía y Sudáfrica).
Más cerca de casa, la situación griega todavía es preocupante. Aunque la financiación está garantizada tras el acuerdo alcanzado en julio, un nuevo ajuste presupuestario impuesto mantendrá a Grecia sumida en la recesión, con una tasa de desempleo y una deuda pública en niveles insostenibles.
Estrategia de inversión
El próximo ejercicio financiero debería marcar la continuación de las principales tendencias de asignación de activos en 2015.
Preferencia por las acciones en vez de la renta fija
Se espera que los tipos de interés se mantengan a niveles históricamente bajos en los países desarrollados. Por consiguiente, el rendimiento esperado de las acciones conserva su atractivo relativo, en un contexto general de crecimiento moderado.
Europa es preferida para la asignación geográfica de inversiones en capital
Las empresas europeas se benefician de un contexto de tipos de interés bajos, un crecimiento económico gradual y un debilitamiento del euro frente a las principales divisas extranjeras. Estos elementos favorecen la recuperación del crecimiento de los beneficios a pesar de que haya quedado rezagada a causa de la crisis del euro. Las acciones estadounidenses ofrecen un potencial más limitado y las acciones europeas están más atractivas por valoración que las compañías americanas.
Las acciones de los mercados emergentes deberían mostrar un rendimiento en línea con su potencial a largo plazo, debatiéndose entre la baja valoración de las cotizaciones en bolsa y el continuo deterioro de las perspectivas de beneficios de las empresas de la región.
Renovado interés por los bonos ligados a la inflación
A pesar de sus bajos rendimientos, los bonos todavía merecen tener su lugar en cualquier cartera equilibrada. Seguiremos prestando especial interés a los bonos ligados a la inflación, particularmente en los países anglosajones donde deberían observarse las primeras presiones sobre los precios y los salarios.