Hay pocos debates tan acalorados como el que enfrenta los partidarios de la gestión activa contra los defensores de la gestión pasiva.
Para alimentar este debate, sin pretender resolverlo, Morningstar acaba de publicar un Barómetro Gestión Activa vs Gestión Pasiva, basado en datos que reflejan la experiencia de los inversores en estos dos tipos de gestión. El barómetro (que actualizaremos semestralmente – puede consultar el primer informe pinchando aquí) mide el rendimiento de los gestores activos frente a sus compañeros pasivos dentro de sus respectivas Categorías Morningstar.
Este Barómetro ayuda a los inversores a evaluar mejor sus probabilidades de tener éxito con los gestores activos en distintas clases de activos, períodos de tiempo, y niveles de comisiones.
Este barómetro es único en la manera pragmática que mide el éxito del gestor activo. Se comparan las rentabilidades de los gestores activos contra un grupo formado por los fondos de índice pasivos (incluidos ETFs) pertinentes.
Creemos que este es un mejor enfoque que una comparación con un índice que no es invertible. El informe también mide la rentabilidad ponderada por patrimonio y la rentabilidad media aritmética para los fondos activos y pasivos, la tasa de supervivencia y la rentabilidad por cuartil dentro de cada categoría.
En resumen, el informe debe dar a los inversionistas una mejor idea de cómo los inversores en fondos de activos y pasivos en realidad les ha ido a través de categorías.
Y el ganador es…
El Barómetro activo/pasivo llega a la conclusión que los fondos de gestión activa en general han estado por debajo de los fondos de gestión pasiva, especialmente en horizontes de tiempo más largos, y han experimentado tasas de mortalidad más altas (es decir, muchos se han fusionado o han cerrado).
Además, el informe señala que el fracaso tiende a estar correlacionado positivamente con el nivel de comisiones. Es decir, los fondos más caros tienen más probabilidad de obtener peores resultados o de ser cerrados o fusionados en periodos largos de tiempo, mientras que los fondos más baratos tienen más probabilidad de sobrevivir y tienen más probabilidad de éxito.
Los datos también sugieren que los inversores han tendido a invertir en fondos con mejores resultados, ya que las rentabilidades medias ponderada por patrimonio suelen ser superiores a las rentabilidades medias equiponderadas. Pero la gestión pasiva no bate a la gestión activa en todas las categorías como demuestra los datos de las categorías mid-value (fondos de compañías de mediana capitalización y estilo value) y foreign large-blend (fondos de acciones extranjeras de gran capitalización).