Una de las tendencias que prevalecerán en estos próximos años es una mayor sensibilidad por parte de los gestores de fondos y de los propios inversores (no sólo institucionales, sino también particulares) a temas relacionados con el medioambiente, la responsabilidad social y el gobierno corporativo (lo que se conoce por las siglas ESG en inglés).
Hay fondos, los llamados fondos socialmente responsables o éticos, que invierten asumiendo abiertamente un mandato que toman en cuenta estos factores. Pero también hay fondos que no tienen la etiqueta de “responsables”, pero que incorporan estos factores en el proceso de inversión. En Morningstar hemos lanzado hace poco un rating de sostenibilidad que mide lo bien (o lo mal) que las empresas incluidas en la cartera de un fondo lo hacen en términos de ESG en comparación con los demás fondos de su categoría. Ese rating se traduce en un determinado número de globos: los fondos que mejor puntúan en temas de medioambiente, responsabilidad social y gobierno corporativo conseguirán 5 globos y los que peor puntúan 1 sólo globo (siempre que podamos analizar al menos el 50% de la cartera).
Evidentemente lo ideal, para aquellos inversores sensibilizados con esta temática, es combinar el rating de sostenibilidad con el rating cualitativo de nuestro equipo de análisis de fondos. Es lo que hemos hecho seleccionando a continuación fondos de renta variable europea que tienen el máximo rating de sostenibilidad y un rating cualitativo positivo.
Estrategia: La estrategia de este fondo se basa en compañías de calidad que sean capaces de crecer independientemente del ciclo económico. El fondo pertenece a la categoría de Renta Variable Europa Gran Capitalización Estilo Crecimiento.
Equipo: Los tres gestores son Arnaud Cosserat, Laurent Dobler y Franz Weis, pero la gestión es altamente colegial y cada idea de inversión se discute extensamente entre todos los miembros del equipo antes de ser agregada a la cartera.
Construcción de cartera: La construcción de la cartera se basa en la selección de acciones (bottom-up). La primera etapa consiste en identificar empresas muy sólidas, con posiciones dominantes en el mercado y una alta rentabilidad independientemente del ciclo económico. La mayoría de los valores cíclicos, incluyendo las financieras, está por lo tanto habitualmente excluida del universo de inversión. Luego, las empresas seleccionadas están sujetas a un análisis fundamental intensivo, incluyendo numerosas visitas a empresas y reuniones con la dirección y sus competidores. Al final, sólo 80 valores conforman el universo de inversión. Se analiza estos 80 valores bajo un riguroso proceso de evaluación basado en el descuento de beneficios y dividendos. La selección final de acciones es la resultante de estos niveles de valoración y de los puntos de entrada identificados por los gestores. Su horizonte de inversión es el largo plazo, entre tres y cinco años. Esta cartera muy concentrada, con un total de unas 35 acciones, muestra unas fuertes apuestas de mercado y el active share del fondo comparado con el índice MSCI Europe se ha situado históricamente entre el 85% y el 90%.
Gestión del riesgo: El fondo tiene un excelente historial de rentabilidad ajustada al riesgo a largo plazo. Por lo tanto, tenemos una opinión positiva en este sentido. A cinco y diez años, el fondo se coloca por encima de la media de su categoría, con un riesgo considerablemente inferior tanto desde el punto de vista de la volatilidad y como del maximun drawdown (o pérdida máxima). Este fondo no está destinado a batir al mercado en todos los entornos, en particular cuando los mercados están favoreciendo las acciones de menor calidad.
Precio: Los costes totales del fondo son más bajos que la mediana de su categoría, lo que le confiere una ventaja adicional.
Estrategia: Fondo de renta variable europea de estilo valor con una cartera concentrada de unos 25-35 títulos y con fuertes desviaciones respecto al índice de referencia y a sus competidores. El fondo pertenece a la categoría de Renta Variable Europa Gran Capitalización Estilo valor.
Equipo: El fondo está gestionado por Isabel Levy, cofundadora de Metropole y por Ingrid Trawinski que se incorporó en la compañía en 2007. También cuentan con el apoyo de dos gestores que se incorporaron en 2014 y 2015 para reforzar las capacidades de análisis. Nos gusta el hecho de que los gestores invierten directamente su dinero en el fondo, alineando de esta forma sus intereses con los de los inversores.
Construcción de cartera:
El enfoque de valor utilizado en este fondo está dirigido principalmente a los valores europeos de gran y mediana capitalización, aunque también puede pescar en títulos por debajo de 100 millones de euros de capitalización, sin restricciones de benchmark o sectores. El equipo hace un primer filtro en base a criterios de valoración para detectar compañías que tengan un descuento de al menos el 20% respecto al valor estimado. El equipo utiliza métodos de valoración bastante pragmáticos, como la comparación de los ratios financieros dentro del mismo sector o industria, el uso de múltiplos o un análisis de la suma de las partes. El siguiente paso es más cualitativo y consiste en reuniones con el management de las compañías para entender el negocio y los catalizadores para la revalorización, evitando así uno de los riesgos importantes de este enfoque: la trampa de valor, es decir compara acciones que pueden permanecer con valoraciones deprimidas. El equipo es consciente de este riesgo y no invierte, por ejemplo, en empresas que no tengan un sólido balance. Este enfoque da como resultado una cartera de 25 a 35 títulos. El efectivo puede ser utilizado de forma táctica, pero permanece en un nivel bajo en comparación con otros fondos de valor.
Gestión del riesgo: Durante los últimos cinco años, el fondo ha tenido dos años muy difíciles (2011 y 2014). Si bien estos períodos de bajo rendimiento son explicables dado la muy alta convicción del enfoque de valor, pueden ser demasiado duros para algunos inversores aversos al riesgo. Para los otros, este fondo volátil ha tenido buenos resultados a largo plazo. El equipo ha demostrado repetidamente fuertes habilidades en la selección de valores. En los últimos 10 años, así como desde su lanzamiento, el fondo sigue situándose por delante de su categoría en una base ajustada al riesgo.
Precio: El último dato de gastos totales (1,57%) muestra unos costes por debajo de su media histórica y están más o menos en línea con la media de su categoría Morningstar.
FP CRUX EUROPEAN SPECIAL SITUATIONS
Estrategia: Fondo de pequeñas y medianas compañías europeas fuera del Reino Unido, de alta convicción y gestionado por un gestor con una amplia experiencia en acciones europeas.
Equipo: Richard Pease gestiona este fondo desde su lanzamiento en octubre de 2009, después de que se fuera a Henderson, aunque su experiencia con acciones europeas data de la década de 1980. En junio de 2015, Pease dejó a Henderson Global Investors para irse a Crux Asset Management, llevándose con é los activos del Henderson European Special Situations para el FP Crux European Special Situations.
Construcción de cartera: La construcción de la cartera está basada en un proceso de bottom-up de selección de acciones y el nivel de convicción del gestor en una empresa, sin tomar en consideración el índice de referencia. La selección de acciones está impulsada por cuatro factores clave: el negocio de la compañía, su gestión, sus finanzas y su valoración. En primer lugar, el gestor busca compañías que ofrecen consistentemente un retorno sobre el capital por encima del coste del capital. Estas empresas tienden a tener beneficios estables antes de intereses e impuestos y sean capaces de sostener esos beneficios y de hacerlos crecer. En segundo lugar, examina la gestión de la empresa, ya que prefiere la calidad, un management estable con antecedentes probados y cuyos intereses se centran en los accionistas. Luego, el gestor realiza analiza la vulnerabilidad de la empresa a ventas más débiles, y averigua si la compañía está generando un buen flujo de caja libre. Pone gran énfasis en el potencial riesgo a la baja asociado con la inversión. Es probable que el enfoque de inversión favorezca a empresas que estén infravaloradas, mal entendidas, desfavorecidas o que tienen un verdadero potencial de crecimiento. Por último, busca empresas con estos criterios que coticen a precios atractivos en relación con sus competidores y con el mercado. El gestor utiliza el efectivo como una defensa estratégica contra la volatilidad del mercado, cuando lo considere apropiado.
Gestión del riesgo: Desde su creación, este fondo ha registrado sólidas rentabilidades en términos absolutos frente a su índice de referencia, el MSCI Europe ex UK. Además, lo ha logrado con una menor volatilidad que el índice. Dicho esto, los inversores no deben confundir este fondo con un fondo de bajo riesgo. No es inusual que el fondo se desmarque de la competencia, dado el criterio agnóstico y de alta convicción del gestor, como fue el caso durante el mercado alcista de 2013, cuando la rentabilidad sufrió por la falta de exposición a acciones sensibles a la recuperación europea. Por otro lado, el interés del fondo en empresas con fuertes balances puede ayudarle a mitigar las caídas, como en el 2011, cuando el fondo superó cómodamente al índice y a la media de su categoría.
Precio: Los gastos corrientes de la clase retail es ligeramente superior a la media de su categoría, pero no altera nuestra opinión sobre el fondo.
HENDERSON GARTMORE CONTINENTAL EUROPEAN
Estrategia: Fondo de renta variable europea de gran capitalización excluyendo Reino Unido que combina temas sectoriales con análisis fundamental de compañías.
Equipo: El gestor, John Bennett, tiene una gran experiencia en la gestión de carteras de renta variable europea. Ha trabajado durante 17 años en GAM, donde ha construido una sólida trayectoria antes de trasladarse a Gartmore en febrero de 2010 para gestionar este fondo. Gartmore fue adquirido por Henderson un año más tarde, y el fondo cambio de nombre.
Construcción de cartera: El gestor presta poca atención al índice de referencia al construir la cartera que se concentra en unos 50-65 nombres. Las inversiones están impulsadas por sus convicciones a nivel de temática y de acciones individuales. La cartera se caracteriza, por lo tanto, por grandes posiciones activas a nivel de compañías, sectores y países. La mayoría de las participaciones en la cartera son grandes valores por lo que el fondo se sitúa en el segmento de Large Cap en el Morningstar Style Box. Dicho esto, el gestor suele encontrar oportunidades en otros segmentos del mercado, aunque la exposición a pequeñas y medianas empresas nunca ha excedido el 10% desde que el gestor está al mando del fondo.
Gestión del riesgo: Desde que gestiona el fondo, John Bennett ha conseguido superar a su categoría y al benchmark. Además, siempre ha superado a la media de sus competidores y al índice de referencia en cualquier periodo de cinco años. El carácter no restringido de la cartera significa que las rentabilidades a corto plazo pueden desviarse mucho del índice de referencia. Si bien la posición sectorial tiene un impacto en la generación de alfa del fondo, es la selección de acciones la que ha sido el principal impulsor a largo plazo. La desviación estándar del fondo ha aumentado por encima de la media de la categoría durante los últimos tres años, pero observamos que permanece por debajo en el periodo de cinco años. Su rentabilidad sigue situándose en el cuartil superior sobre una base ajustada al riesgo en los últimos cinco años.
Precio: La clase retail tiene unos costes de 1,77% annual frente a un 1,57% para la mediana de la categoría.